Leonardo Da Vinci es una de las figuras más sobresalientes de la Historia. Un genio universal, mundialmente reconocido por sus obras. Pintor, arquitecto, escritor, científico, inventor, anatomista, botánico... un auténtico ejemplo del hombre renacentista polifacético. Nos ha legado obras como
La Gioconda,
El hombre de Vitruvio o
La última cena, por citar sólo algunos de los ejemplos más célebres, pero de todas sus obras, mi favorita, siempre fue
La dama del armiño. Un óleo maravilloso, que representa una bella joven, de mirada contemplativa, posando con un armiño blanco, símbolo de la pureza. Se cree que la joven era la amante oficial del Duque de Milán,
Cecilia Gallerani, que contaba con 17 primaveras y aparte de su evidente belleza, según parece, interpretaba música y escribía poesía. Una joven inteligente y talentosa.
El cuadro veraneó durante tres meses en Madrid este pasado año, en una de sus escasas y limitadas salidas desde Cracovia, desde el Museo Czartoryski, donde habitualmente se expone. Desde su creación, alrededor de 1489, ha estado desaparecido, escondido emparedado e incluso confiscado por los nazis. Una dama con sobresaltos.
Recientemente
El País Semanal ha publicado diez fotografías de
Manuel Outumuro, en las que ha querido emparejar a diez intérpretes con diez cuadros de prestigio mundial.
En la portada han seleccionado una en la que aparece
Leonor Watling en la figura de
La Dama del Armiño, y como yo llevaba un tiempo pensando en colocar un post sobre una de mis debilidades, es decir, la cantante de
Marlango, Leonor Watling. Aprovecho este acontecimiento para hacérselo saber.
¿No les parece muy acertada la unión? Y no me refiero a la coincidencia de nombres (
Leonardo - Leonor).
Aplausos.
Pd: Si alguna vez voy a
Cracovia, ya imaginan lo que no me gustaría perderme.