miércoles, 23 de marzo de 2011

La primera

Ocurrió en enero pero me enteré la semana pasada, el miércoles para ser exactos, hoy hace ya casi una semana (¡cómo pasan los días!). Volvía del trabajo con las prisas que siempre traigo cuando hay televisado un partido grande de eliminatoria de octavos de final de Champions. Pero antes de que pudiera sentarme relajado a ver el partido, mucho antes, tenía que ocuparme de los niños: ponerles los pijamas, prepararles la cena, hacer que se la coman (lo más complicado) y acostarlos. Mi mujer que esperaba impacientemente a que yo volviese del trabajo para irse a una cita médica, me hizo el favor, antes de que yo volviera, de bañarlos y de ponerles los pijamas y las batas a los pequeñajos.

Pensaba hacerlo todo lo más rápido posible. El tiempo ahogaba. Ignoraría las llamadas telefónicas, no recogería ningún lío de la cocina ni del salón y dejaría la cansina obligación para el descanso, o para después del partido si era preciso. No me distraería con nada que me retrasara en mi trepidante tarea. No me pondría cómodo y me dejaría puesta la misma ropa con la que volvía apresuradamente del trabajo, la misma con la que cogí la carta del buzón mientras esperaba el ascensor, moviendo el pie nerviosamente, intentando averiguar, agudizando el oído, si el ascensor se estaba acercando o alejando.

Cuando giré la llave en la cerradura y entré en la casa comprobé que todo estaba como lo supuse. El salón patas arriba, la cena por hacer, el reloj marcando una hora demasiado cerca del inicio del partido pero al menos los niños tenían puestos los pijamas y las batas. Antes de irse mi mujer me recordó unas cuantas instrucciones de uso de los niños y yo le di la carta que llevaba su nombre que acababa de recoger del buzón.

Esa carta decía lo que ocurrió en enero pero que no me enteré hasta la semana pasada, justo después de cuando mi mujer la abrió, la leyó y dijo amarga y casi recriminatoriamente: te han puesto una multa de tráfico. Por exceso de velocidad.... ¿se dan cuenta? mi primera multa de tráfico.


Al menos mi equipo ganó.

3 comentarios:

David dijo...

Una pregunta, ¿la multa es por excedso de velocidad en un punto en el que antes se podía ir a 120 y ahora a 110 km/h o se trata de una multa en otro punto con otra limitación de velocidad? Es más, ¿a cuánto ibas? ¿Por debajo de 120 km/h pero por encima de 110 km/h?

No sé si has visto en prensa, pone que con la nueva medida, ha descendido el número de multas un 62%, y es que quizás novedades en las normas nos hace recordar lo que está bien y lo que está mal, y parece que nos da por corregir antiguos malos hábitos...

En fin, ya sanbes que es por alimentar este debate sobre la bondad o no de la medida...

David dijo...

Me acabo de dar cuenta que el anterior comentario mío no tiene sentido, ya que dices que la multa es de enero, vamos, antes de la medida de bajada de velocidad, con lo cual, no era un post tuyo recriminatorio sobre la nueva norma sino sobre el hecho de que te han puesto tu primera multa... ¿de verdad es tu primera multa? ¿después de tanto tiempo con el carné? Tío, eres un crack!!!

Salva dijo...

Pues la realidad es que mi post no tenía ningún sentido recrimitanorio sobre el nuevo límite de velocidad, más bien era una queja por mi primera multa. Y admito que la merezco, no culpo a nadie de ello. Es sólo que jode.

Iba a 74 Km/h cuando debí ir a 50 Km/h, pero es que era un domingo por la mañana, todos los semáforos estaban en verde, y yo era el único coche a la vista. En fin... no voy a poner excusas.