viernes, 29 de octubre de 2010

Stones

En la música suele decirse que eres de los Beatles o de los Stones. Y como a mí siempre me tiró más el rock que el pop, que viene a ser más o menos un paralelismo de la elección anterior, pues, entonces, soy obligatoriamente de los Stones. Dejando claro que eso no quiere decir que no ame muchísimas canciones de los Beatles, ni que cada cosa de los Rolling Stones me vuelva loco, aunque casi.

Y es que los Stones tienen ese rock sucio, básico y animal que me pierde. Algo así como unas características o señas de identidad propias que hacen que desde los primeros segundos de la canción ya sabes que son ellos, aunque no la hubieses escuchado nunca. Quizás sea el descaro en las maneras de cantar de Jagger, o ese rítmico riff artrítico de Mr Keith Richards, o las académicas entradas de Watts, o puede que muchos de los punzantes solos del flaco Wood, aunque seguramente sea todo al mismo tiempo lo que tiene gran parte de culpa de mi amor por el rock.

Tardé cuatro tentativas en poder verlos en directo. Recorrí miles de kilómetros para asistir a tan sólo uno de sus conciertos, para vivir de primera mano esa experiencia de saber qué es exactamente eso que dicen de que los abuelos Stones saben, sin lugar a dudas, tocar verdaderamente eso que llaman auténtico rock.


2 comentarios:

David dijo...

Hola Salva:
Como sabrás, me gusta mucho el cine, soy muy cinéfilo y soy un devorador de películas. Gracias a ti, tengo siempre en casa una gran cantidad de pelis con las que disfrutar parte de mi tiempo libre, y es que la gran cantidad de pelis que tienes me permite ver grandes películas comerciales, malas películas, cine independiente, cine internacional y nacional... pero siempre me quedo con las ganas de comentarte "la última" que he visto de las que me has dejado.
Como nunca me acuedo y me gustaría lanzarte mensajes de lo que me ha parecido cada una, quiero aprovechar tu blog para ir poniendo posts de cada una que vea (salvo que prefieras que no lo haga o que lo haga de otra forma).

Hoy empiezo con una buena película: "Una historia verdadera": inteligente road movie basada en hechos reales de David Lynch que desde luego, merece mucho la pena verla, pese a ser algo lenta, pero en ningún momento aburrida sino todo lo contrario.

En fin, una peli para disfrutar.

Salva dijo...

Hola David.

Por supuesto. Sabes que este blog esta abierto para mucha gente, cuanto más para ti, mi más honroso y mejor comentarista.

De hecho me parece una muy buena idea, y ahora mismo estoy pensando cómo puedo conseguir darte algo más de espacio en el blog para desatar esa vena cinéfila-crítica que corre por tus adentros.