Se anunció el concierto de Glen Hansard en Granada, en el Palacio de Congresos, y mi buen amigo Iker y yo no nos lo pensamos dos veces, a pesar de ser un jueves de enero a los pies de Sierra Nevada, donde lo único asegurado iba a ser el frío que íbamos a tener y los repetitivos bostezos que seguirían el viernes en el trabajo. Ambos habíamos visto actuar al cantante irlandés unos años antes en el mismo recinto. Ya lo conté en este blog. Por eso se me ha ocurrido aquello de poner en el título de esta entrada del blog aquello de Take 2, como en una improvisación de jazz (tonterías de un escritor chistoso). También lo pude ver, aunque aquella vez en Madrid y no en concierto propio, sino como telonero de Eddie Vedder en su paso en el Wizink Center. Lo cierto es que sus dos conciertos me gustaron mucho.
De los tres conciertos que ya he visto de Glen Hansard, diría que me quedo claramente con este último. Además de ser el más largo, que siempre es un dato importante porque como es normal incluye más canciones, en este concierto tocó canciones que me encantan, muchas de mis favoritas. Pero por si esto fuera poco, además, una vez terminado el concierto regresó a recoger sus cosas del escenario, y unos cuantos asistentes que estábamos allí tuvimos la suerte de verle interpretar a capella para los pocos que quedábamos en la sala una última canción, un regalo inesperado, uno de mis temas favoritos, This Gift. Además nos firmó y algunos tuvimos la suerte de hacernos una foto con él. Una demostración de su cercanía.
Fue una delicia escucharlo cantar y verlo explicar sus canciones, incluso tras el concierto poder charlar con él, comprobar su cercanía y su infinita paciencia, pero sobre todo disfruté de su intensa voz.