Hoy a la hora del almuerzo durante una distendida conversación entre hombres, mi hermano me preguntó cual cerveza me gustaba más. Yo le dije que la cerveza Paulaner es una que me gusta bastante pero, como es de importación y por lo tanto cara, en casa suelo comprar San Miguel, aunque a veces también compro Mahou o Cruzcampo. Mi cuñado Paco también intervino comentando sus gustos cerveceros. Como verán una auténtica conversación de hombres. Y es que somos así, sota, caballo y rey, no hay más. Fútbol, coches, mujeres y cerveza. Simple y sencillo. No busquen más porque no lo encontrarán. Cuando un hombre va al servicio, va solo y los demás seguimos hablando de lo que estábamos hablando y no criticamos si tiene más barriga o si no combina el cinturón con los zapatos.
Bueno, a lo que iba, que me pierdo, le dije a mi hermano que yo no era muy exigente a la hora de beber cervezas. Soy bastante cervecero, pero sin embargo, cualquier marca me vale. No le hago asco a ninguna, bueno... a casi ninguna... y es que hay alguna cosa por el mundo que vaya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario