Hoy sería el cumpleaños de mi amigo Lolo, 33 tacos cumpliría. Desde que no está con nosotros esta fecha es algo extraña para mí. Es triste porque no está, pero al mismo tiempo esconde algo de celebración que intento mantener y, con este sentido, todos los años me he tomado al menos una cervecita en su memoria. Hoy me he tomado dos.
Ayer tras el partido, fuimos Alberto, Mario y yo a reposar y asimilar el ascenso del Málaga al bar de la plaza de la Constitución. Me tomé dos pintas. No estaba con nosotros pero sí. Todos lo teníamos en la cabeza. Mario, Alberto y yo lo hablamos antes del partido. Tineo también lo comentó y mi hermano. Todos. No estaba allí pero sí. Después cuando llegué de vuelta a casa y me senté en este ordenador, delante del monitor pensando qué escribir, no supe qué escribir. No tenía palabras. Tenía cientos de abrazos huecos, palmas en lo alto que no choqué, gritos sin eco, sin su eco. Me faltaba una sonrisa de la que me quedé ya hace tiempo huérfano. Me quedé sin palabras y sólo se me ocurrió colgar el himno.
Pero hoy, otra vez delante del teclado, en un día tan especial, me sentía en deuda. Y me ha vuelto a la memoria una canción que a Lolo le gustaba mucho. Escrita por Lennon /Mc Cartney y cantada por Ringo Starr, aunque la versión que a él le enamoraba era una de Joe Cocker. Cuando me lo dijo le pregunté si conocía una versión en directo por Joe Cocker cantada en Woodstock de 1969 y me dijo que no. Tiempo más tarde me dijo que la había escuchado finalmente y que le encantaba. La llevaba en su mp3 me dijo. La canción era With a little help from my friends.
Me gustaba imaginar que quizás la canción le ayudaría a soportar los malos momentos. A sobrellevarlos de alguna manera. Pensé qué bien hice recomendándole aquella magnifica versión, con título tan acertado.
Ahora tiempo más tarde me doy realmente cuenta de que fue él el que me comentó que le gustaba la canción y que es a mí al que verdaderamente ayuda ahora a soportar los malos y jodidos momentos y que soy yo el que ahora se agarra a la canción. Y no puedo más que dar las gracias por aquella conversación y por la canción. Y por eso comparto esto aquí y ahora, por si hay alguien a la que también pueda esta canción de título tan apropiado ayudar, en alguna circunstancia, como la que a mí me tiene agarrado del cuello ahora.
Ayer tras el partido, fuimos Alberto, Mario y yo a reposar y asimilar el ascenso del Málaga al bar de la plaza de la Constitución. Me tomé dos pintas. No estaba con nosotros pero sí. Todos lo teníamos en la cabeza. Mario, Alberto y yo lo hablamos antes del partido. Tineo también lo comentó y mi hermano. Todos. No estaba allí pero sí. Después cuando llegué de vuelta a casa y me senté en este ordenador, delante del monitor pensando qué escribir, no supe qué escribir. No tenía palabras. Tenía cientos de abrazos huecos, palmas en lo alto que no choqué, gritos sin eco, sin su eco. Me faltaba una sonrisa de la que me quedé ya hace tiempo huérfano. Me quedé sin palabras y sólo se me ocurrió colgar el himno.
Pero hoy, otra vez delante del teclado, en un día tan especial, me sentía en deuda. Y me ha vuelto a la memoria una canción que a Lolo le gustaba mucho. Escrita por Lennon /Mc Cartney y cantada por Ringo Starr, aunque la versión que a él le enamoraba era una de Joe Cocker. Cuando me lo dijo le pregunté si conocía una versión en directo por Joe Cocker cantada en Woodstock de 1969 y me dijo que no. Tiempo más tarde me dijo que la había escuchado finalmente y que le encantaba. La llevaba en su mp3 me dijo. La canción era With a little help from my friends.
Me gustaba imaginar que quizás la canción le ayudaría a soportar los malos momentos. A sobrellevarlos de alguna manera. Pensé qué bien hice recomendándole aquella magnifica versión, con título tan acertado.
Ahora tiempo más tarde me doy realmente cuenta de que fue él el que me comentó que le gustaba la canción y que es a mí al que verdaderamente ayuda ahora a soportar los malos y jodidos momentos y que soy yo el que ahora se agarra a la canción. Y no puedo más que dar las gracias por aquella conversación y por la canción. Y por eso comparto esto aquí y ahora, por si hay alguien a la que también pueda esta canción de título tan apropiado ayudar, en alguna circunstancia, como la que a mí me tiene agarrado del cuello ahora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario