jueves, 31 de marzo de 2011

Mi librería

Comprar libros siempre en la misma librería tiene sus ventajas. La principal de ellas es que al conocer la librería sabes directamente, sin rodeos, donde se encuentra más o menos lo que andas buscando desde mucho antes siquiera de poner el primer pie en la librería, y ese conocimiento, esa ubicación conocida, te permite ir derecho hacia el objetivo, o bien, retrasar el encuentro, alargando así la búsqueda, deslizando la mirada distraídamente por los cuidados estantes, yendo y viniendo, disfrutando así de las bellas flores del jardín antes de recoger el fruto. Otra ventaja de repetir asiduamente las compras en una librería es que conoces a los dependientes y el trato con ellos puede llegar a ser más cercano y amigable, te informarán de las novedades y de vez en cuando te obsequiarán con catálogos, separadores o, incluso, ediciones no venales como la que me acabo de leer: Elogio de la Lectura y la Ficción, discurso ofrecido por Mario Vargas Llosa ante la Academia Sueca en la entrega del Premio Nobel de Literatura 2010. Toda una joya.

Estas son sólo algunas de las razones por la que no suelo comprar mis libros en las grandes superficies, siempre tan impersonales, desordenadas y cargadas de insulsas novedades.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Medianoche en París

Como cada año, aunque un poco cambiada de fechas, se presenta la nueva película de Woody Allen -El Maestro-, Midnight in Paris (Medianoche en París), una película rodada en París, como bien anuncia el título -un aliciente más para ver la película- con un reparto muy pero que muy atractivo, entre los que se encuentran tres ganadores de Oscars: Kathy Bates, Adrien Brody y Marion Cotillard.

El cartel me encanta, entra directamente entre los mejores de la filmografía del gran Allen, ese toque VanGoghiano en el fondo de París sólo es mejorable si explica su sentido al ver la película y, por si fuese poco, el trailer promete mucho, ¿qué digo mucho? ¡Muchísimo!

Apunten, su estreno en España será el 13 de mayo, ya está dicho lo esencial. No se la pierdan.


martes, 29 de marzo de 2011

Adele - Rolling in the deep

No me preguntéis nada de esta cantante, pues no sé mucho más de ella que no aparezca en la wikipedia, sin embargo, sé que me encanta esta canción, especialmente su voz, su tono grave, dulcemente suave y aterciopelado, el ritmo repetitivo, los coros acompasados, las pausas inesperadas, los cambios de compás, su intenso in crescendo, la letra... todo.

A pesar de estar contento por haber descubierto esta canción, me refiero, evidentemente, descubierto para mí, pues por lo visto el vídeo tiene más de veintiocho millones de visitas, me entristece saber que debo ser el único que no la conocía.

miércoles, 23 de marzo de 2011

La primera

Ocurrió en enero pero me enteré la semana pasada, el miércoles para ser exactos, hoy hace ya casi una semana (¡cómo pasan los días!). Volvía del trabajo con las prisas que siempre traigo cuando hay televisado un partido grande de eliminatoria de octavos de final de Champions. Pero antes de que pudiera sentarme relajado a ver el partido, mucho antes, tenía que ocuparme de los niños: ponerles los pijamas, prepararles la cena, hacer que se la coman (lo más complicado) y acostarlos. Mi mujer que esperaba impacientemente a que yo volviese del trabajo para irse a una cita médica, me hizo el favor, antes de que yo volviera, de bañarlos y de ponerles los pijamas y las batas a los pequeñajos.

Pensaba hacerlo todo lo más rápido posible. El tiempo ahogaba. Ignoraría las llamadas telefónicas, no recogería ningún lío de la cocina ni del salón y dejaría la cansina obligación para el descanso, o para después del partido si era preciso. No me distraería con nada que me retrasara en mi trepidante tarea. No me pondría cómodo y me dejaría puesta la misma ropa con la que volvía apresuradamente del trabajo, la misma con la que cogí la carta del buzón mientras esperaba el ascensor, moviendo el pie nerviosamente, intentando averiguar, agudizando el oído, si el ascensor se estaba acercando o alejando.

Cuando giré la llave en la cerradura y entré en la casa comprobé que todo estaba como lo supuse. El salón patas arriba, la cena por hacer, el reloj marcando una hora demasiado cerca del inicio del partido pero al menos los niños tenían puestos los pijamas y las batas. Antes de irse mi mujer me recordó unas cuantas instrucciones de uso de los niños y yo le di la carta que llevaba su nombre que acababa de recoger del buzón.

Esa carta decía lo que ocurrió en enero pero que no me enteré hasta la semana pasada, justo después de cuando mi mujer la abrió, la leyó y dijo amarga y casi recriminatoriamente: te han puesto una multa de tráfico. Por exceso de velocidad.... ¿se dan cuenta? mi primera multa de tráfico.


Al menos mi equipo ganó.

lunes, 21 de marzo de 2011

¡¡¡¡Shinyo Sawako!!!!

Una de las fotos más espectaculares con la que me he cruzado últimamente es ésta que comparto ahora, aunque se tomó el 12 de abril de 2008. Teniendo en cuenta que en los tiempos que vivimos, por desgracia, va uno viendo ya demasiadas cosas de este cariz, he de decir que esta foto me dejó boquiabierto y siento que soy completamente incapaz de imaginar la magnitud de lo que ocurrió un segundo después... sólo sé que 16 muertos.

Hacer click en la foto debe ser obligatorio.

domingo, 20 de marzo de 2011

Que dure

Hace un par de semanas expuse aquí mi férrea e inquebrantable fe en la permanencia del Málaga CF, mi Málaga. Y ya ven, dos semanas después seguimos en descenso pero el objetivo tiene otra pinta. Los dos últimos partidos los hemos ganado, 0-2 en San Sebastián contra la Real Sociedad y 2-0 hace un rato en La Rosaleda frente al Español (aprendí a escribirlo así desde pequeño y me cuesta horrores hacerlo de otra manera).

No hay nada hecho, pero los ánimos son otros. El entorno es otro, la afición, los periodistas. Todo ha cambiado y la sensación general ahora es la de que el objetivo es totalmente posible, no será fácil, por descontado, pero ahora dependemos de nosotros mismos. Hemos comenzado a recuperar jugadores. Se nota especialmente la vuelta de Duda y el acertado fichaje de ultimísima hora de Willy Caballero, que me da en la nariz que tenemos portero para rato.

Demichelis y Weligton están dando sobriedad a la defensa, Jesús Gámez ha vuelto al equipo, Eliseu está más centrado. Apoño, Recio, Seba, Portillo y Juanmi están aportando lo suyo, y hasta Rondón parece que no necesita tantas ocasiones para marcar. Como digo, ahora decididamente jugamos con el viento a favor. Esperemos que dure.

miércoles, 16 de marzo de 2011

Literatura y fantasma - Javier Marías

Los que os dejáis caer de vez en cuando por este blog personal seguramente sabréis que cada poco me gusta salpicar mis lecturas con algún volumen de Javier Marías, uno de los escritores hacia los que más frecuentemente dirijo mi mirada de lector. He leído varios libros recopilatorios de artículos escritos por el autor madrileño (Harán de mí un criminal, El oficio de oír llover, Demasiada nieve alrededor y Lo que no vengo a decir) y la mayoría de los artículos que aparecen en ellos fueron en su día relecturas de artículos ya leídos por mí anteriormente en los suplementos dominicales, aunque no por eso disminuyó mi interés ni mi disfrute.

Pero en esta ocasión el libro que me trae aquí, Literatura y fantasma -en su edición ampliada- es una mezcolanza heterogénea de ensayos, prólogos y artículos, divididos en diversas secciones poco delimitadas o acotadas como son por ejemplo: Otras vanidades o Maestros ya antiguos. Especialmente acertados y divertidos han sido los artículos sobre Benet, o los de la serie inglesa.

Durante la lectura de estas páginas he ido anotando al margen posibles lecturas futuras, apuntadas por el autor, y estoy seguro de que ninguna de ellas me defraudarán. Ya les iré contando.

Pd. Le doy las gracias a mi hermano y a su señora que me regalaron este libro.

domingo, 13 de marzo de 2011

Una Leffe Blonde

Una de mis cervezas favoritas es la Leffe Blonde, una cerveza belga de abadía, que una vez bien servida en vaso tiene como característica principal un color algo turbio y una espuma bastante densa. Su sabor, a mi parecer, es algo dulzón con un ligero toque a canela, aunque muy suave. El precio es algo más caro que las cervezas nacionales, al ser de importación, pero para ocasiones especiales es un verdadero placer tener guardadas un par de ellas en el rincón más frío del frigorífico. Si no la han probado aún, corran a tomarse un par porque les hago saber que están cometiendo un delito grave.

Tienen un problema a tener muy en cuenta y es que me duran muy poco. Ya me entienden.

viernes, 11 de marzo de 2011

Terremoto en Japón

Cuando uno se asoma en tal fecha como hoy a los medios de comunicación, espera desafortunadamente escuchar noticias sobre los trágicos atentados terroristas del 2004, o incluso sobre el décimo aniversario de la supresión del servicio militar obligatorio, o sobre la interminable y asfixiante crisis o puede que incluso sobre la última paparruchada de Mourinho, pero lo que nunca espera, y menos aún desea, es conocer lo que a todos nos ha dejado boquiabiertos y con el ánimo por los pies.


miércoles, 9 de marzo de 2011

Amberes - Roberto Bolaño

Uno de mis más fiables confidentes literarios me dijo hace tiempo "lee a Bolaño", y así lo anoté en el poco fiable disco duro de mi memoria, y añadió "lee Los detectives salvajes, ó 2666. Sus mejores novelas".

Pasó el tiempo y me hice con Los detectives salvajes, pero lo aparqué en la estantería de futuras lecturas. Luego llegó el ipad, y con él miles de posibilidades donde elegir. Quería comenzar a sacarle partido al ipad leyendo algo corto, no muy extenso, novedoso pero que fuese de calidad y me acordé de Bolaño. Así que buceando por la wikipedia y uniendo las dos premisas (leer a Bolaño y leer algo corto), me llevó a Amberes. Un librito breve del autor chileno, con una portada muy pero que muy sugerente. No lo negarán.

Siendo sincero Amberes no me gustó. Pocos párrafos, puede que más bien frases, salvaría de la quema, aparte de la portada.

Pasó el tiempo y volví a coincidir con mi fiable confidente, le comenté que había leído a Bolaño, Amberes le dije, "puff " repuso dando un sonoro resoplido, "ese libro no hay por donde cogerlo, mal libro escogiste para iniciarte." Quizás fuese eso y no acerté con el primer contacto con Bolaño. Tendré que darle otra oportunidad.

martes, 8 de marzo de 2011

Los últimos

Llevo tiempo queriendo hablarles de mi Málaga CF. Este verano quise hablarles del futuro proyecto del Jeque y sus petrodólares, pero decidí esperar a comprobar qué parte había de cierto; al principio de la temporada pensé en comentar la ilusión que me invadía al ver que renovábamos a jugadores que veíamos más fuera de nuestro equipo que dentro, o de los fichajes de jugadores que hace poco ni soñábamos que pudieran lucir nuestro escudo en sus camisetas; más tarde pensé en maldecir en este blog nuestra sempiterna mala fortuna sobre todo en cuestión de lesiones, especialmente después de utilizar cinco porteros distintos. En el mercado de enero pensé en comentar los sorprendentes fichajes de invierno, incluido el de Pellegrini.

Pero nada de eso hice y nada de eso me trae aquí hoy, pues estoy aquí para decirles que a pesar de que el Málaga lleva un total, a lo largo de la temporada, de catorce jornadas metido en puestos de descenso, catorce de un total de veintisiete (más de la mitad de la temporada) y que al menos va a estar también la jornada siguiente y que de esas catorce jornadas, ocho de ellas son justamente las ocho últimas de las que cinco lo hacemos en la última posición, en la que desgraciadamente nos encontramos ahora, a dos puntos del equipo que nos precede en la tabla clasificatoria y a cuatro de la ansiada salvación. Pues digo, que a pesar de todo eso, a pesar de las caras largas, de la mala suerte, de las lesiones, tiros a los palos, arbitrajes clamorosamente en contra y todas esas cosas, a pesar de todo eso, afirmo que el Málaga se va a salvar. Y les diré por qué. Nos vamos a salvar porque ahora que empieza lo verdaderamente jodido de la liga es cuando el Málaga responde, porque desgraciadamente somos así, y hasta que no nos vemos con el agua al cuello, da la impresión de que no reaccionamos, por eso creo que partimos con ventaja, y porque además siempre dicen que la historia se repite, pues bueno, el año pasado - ya ven que no hay que irse muy lejos- nos salvamos en la última jornada empatando en casa contra el Real Madrid, este año espero hacerlo, si no antes, también en la última jornada frente al Barcelona.

Quedan once jornadas para recortarle cuatro puntos al Zaragoza, tres al Hércules y dos al Almería. Créanme apuesten por ello, o al menos eso espero.

Pd: Ay, qué sufrimiento. ¡Siempre igual!

sábado, 5 de marzo de 2011

Retrato del artista adolescente - James Joyce

Hace años que tengo la intención de leerme la famosísima novela de James Joyce, Ulises, pero entre que nunca había leído nada del autor irlandés y que me frenaba la idea de meterme por primera vez a conocer al autor, precisamente con su obra más voluminosa, que además, tiene fama de ser densa y complicada, incluso farragosa, y que tampoco nunca había encontrado una edición que me atrajese verdaderamente, había ido postergando el momento. Pero estas pasadas navidades tropecé con una edición lo suficientemente atractiva, aunque eso sí, algo cara, que mi señora, siempre tan presta, atenta y espléndida, me regaló.

Leí el prólogo y en él, el traductor y prologuista, José María Valverde (Premio Nacional a la obra de un traductor) aconsejaba, antes de comenzar a leer Ulises, adentrarse en las primeras novelas del autor, particularmente en Retrato del artista adolescente, así que me puse manos a la obra, y busqué una edición económica, pues la crisis aprieta, que echarme a los ojos.

Retrato de un artista adolescente es una novela semiautobiográfica, en la que su personaje principal, Stephen Dedalus, según parece ser, es el mismo que aparece en Ulises, sólo que cuando era joven. En la novela he comprobado gustosamente la dulce densidad de la escritura de Joyce, su fino y agudo uso del vocabulario, su intenso divagar interior así como la evolución del personaje al mismo tiempo que la escritura, ¿o debiera decir estilo?

Un libro que ha incrementado aún más mi interés por la obra de Joyce.

Pd: En el prólogo de Ulises también aconsejan conocer la obra de Homero antes de abarcar la novela. Ains...

Pd2: Olvidé reseñar que la traducción que he leído de Retrato del artista adolescente es de Dámaso Alonso.

viernes, 4 de marzo de 2011

La calle es mía

Jueves, ocho y cuarto de la mañana. Iba yo nadando de espaldas tranquilamente por mi calle, bien pegadito a mi corchera, a mi ritmo, intentando llevar lo mejor posible la respiración cuando, inesperadamente, me dieron un manotazo en el pecho, al momento otro en le pie. Levanté todo lo que pude la cabeza y vi que el nadador con el que me acababa de cruzar iba por medio de la calle. Ocupándola sin complejos. Se habrá despistado -pensé-.

Siguiente vuelta. Otra vez cerquita a la corchera de mi lado de la calle. Me llevé dos manotazos más, esta vez en la cabeza y luego en el muslo. De nuevo el agresor es el mismo despistado de gorro negro. ¡Será posible!

Dos vueltas más tarde. Nado a braza y me encuentro que tengo que adelantar al despistado, que va de espaldas ocupando toda la calle. Lo hago lo más rápido que puedo para intentar llevarme las mínimas tortas posibles. Consigo evitarlas.

Siguiente vuelta. Un manotazo más que me llevo del loco del gorro negro que va como un pato mareado por medio de la calle y que se cree que la calle lleva su nombre.

Siguiente vuelta. Voy de croll, el enemigo viene de espaldas, o algo parecido, se acerca por la mitad de la calle que lleva su nombre, ocupando todo su ancho. Cada vez está más cerca. Decido no predicar con el ejemplo de poner la mejilla 7 veces y cuando mete un manotazo en el agua, justo delante de mi cara, le pongo el brazo justo encima del suyo y cuando intenta subirlo no puede, se medio gira hundiéndose mientras sigo para delante.

Al llegar al final de la calle me vuelvo y veo al hombre agarrado a la tensa línea de flotación de la calle, con carita de haber tragado agua, medio asfixiado.

Siguiente vuelta. Paso junto a él, sigue recuperándose agarrado a la corchera.

Siguiente vuelta. No hay manotazos. Yo voy al lado de mi corchera y él a la suya.

Pd: No hay nada como dejar las cosas claras.

miércoles, 2 de marzo de 2011

110

Qué quieren que les diga. No soy de correr mucho al volante, en realidad casi ni tengo que coger el coche a diario, pues a menudo voy andando al trabajo. Y cuando cojo el coche, la mayoría de las veces, es para hacer trayectos urbanos y de poco recorrido, por lo que la reducción provisional del límite máximo de velocidad no me afecta prácticamente, tan sólo la sufriré, supongo, en pequeños desplazamientos esporádicos y circunstanciales a la capital.

Sin embargo el lunes a eso de las once y media de la noche, al volver del partido del Málaga en La Rosaleda (¡por fin ganamos!), en una autopista desierta, sin apenas tráfico, con tres carriles casi exclusivamente para mí, se me ocurrió circular a 110 Km/h. Por probar. Por gusto. Para hacer de conejito de indias. No me entró sueño, no, pero me dio la sensación de estar parado, y pasé más tiempo mirando el medidor de velocidad para intentar no sobrepasar el novedoso límite que en estar atento a la carretera. Afortunadamente el cambio no se ha hecho efectivo aún y las señales no tenían aún la discutida pegatina de 110, así que pude pisar un poco más el acelerador, aunque sólo un poco más ¿eh?

No sé cómo afectará la reducción del límite máximo de velocidad a la subida del precio del barril de petróleo, ni si afectará directamente a mi bolsillo, o si reducirá los accidentes, o la gravedad de los que se produzcan, lo que es seguro es que el estado recaudará muchísimo más en multas, que es lo que me parece que se busca con este cambio. Siempre lo mismo, una insaciable ansia recaudatoria.